jueves, 12 de julio de 2012

Cuestionario de mi trayecto personal en el tercer ciclo

1.    Mi horario está muy mal hecho, prácticamente paso todo el día en la universidad. Eso me ha obligado (una buena obligación acaso) a leer mucho en la biblioteca de la universidad. Sin embargo, ello no es lo único. Cuando llego temprano a mi casa, o me ausento de las clases, juego fútbol.
2.    Sí. No he sentido que las clases me agoten. Los profesores que me han enseñado este ciclo son buenos. Cada uno de personalidad distinta; cada uno con un estilo diferente de enseñanza. Excelentes todos.
3.    La mayoría de días leo El Comercio pues mi padre lo compra. Cuando mi horario es diurno leo el periódico que regalan en las calles: Publimetro. Revistas leo muy pocas, tal vez porque no me entretienen tanto como los libros; no obstante, Caretas es la única que reviso.
4.    Son muy pocos los que veo, entre ellos está el canal 7. El programa “La función de la palabra” con Marco Aurelio Denegri es interesante, quizá el mejor que existe en la paupérrima televisión peruana.
5.     Para relajarme y escuchar música, busco la emisora 100.1 (Radio Oxígeno). Y si quiero enterarme sobre algunas noticias o rellenarme de información actual, RPP es la indicada.
6.    Me despertó curiosidad ver la película “Un hombre para la eternidad”. Muy buena. Ésta dirige al público a la época de la Inglaterra gobernada por el rey Enrique VIII. La trama intenta resonar (con vehemencia) en nuestra consciencia: el personaje principal Tomás Moro, se ve en una situación inicua; él, respetando sus principios y a la iglesia Católica, no desea cambiar el precepto de su religión. La actitud de superioridad del rey y sus creencias lo encauzarán a la muerte. Una muy buena película que recomiendo sin duda alguna.
7.    He leído muchos. He tratado de desviarme de la rama Literaria del Perú. Los tres libros de ficción de Jorge Luis Borges (El libro de arena, Ficciones y El Aleph); Los tres tomos de los cuentos completos de Julio Cortázar. Del continente del viejo mundo he podido leer sosegadamente el libro de Pérez Galdós, Marianela.
8.    Sí. Las humanidades antes me eran ajenas. Siempre creí (antes de terminar el primer ciclo) que las ciencias formales eran lo que andaba buscando. Pero muy pronto me daría cuenta que no era ello lo que en realidad me apasionaba. Derecho me parece una muy buena carrera, aunque me hubiera gustado más si la Universidad de Lima juntara Ciencias Jurídicas y Literatura, en vez de Derecho y Ciencias Políticas.
9.    Europa, Francia más que todo, es mi destino más deseado. Mi meta es obtener una beca para alguna universidad de ese país y estudiar (sé, de lo poco que sé, que la educación  de la mayoría de los estados europeos, aparte de ser gratuita, te genera ingresos). Lo único que tengo como máxima por el momento es dedicarme a mi carrera y lograr tener un buen promedio. Claro está que antes de eso debo estudiar el idioma Francés en alguna institución encargada de ello.
10. Ha logrado ayudarme a mejorar mi léxico y mi redacción. Ahora entiendo que la escritura académica (sujeto, verbo y predicado) es distinta a la que uno realiza en la literatura o en otra materia. En fin, me pareció muy bueno y didáctico.
Abarcando ahora el tema del profesor, me pareció tal vez que se sobrepasó de las expectativas que yo tenía de alguno. La ironía, la sátira y la bipolaridad quizá lo describan muy bien (una remembranza que tengo sobre él es que un día se le podía observar riéndose a carcajadas y al minuto la seriedad lo invadía de pies a cabeza). Sin embargo, nunca dejó de lado la exigencia ni la profunda enseñanza. Difícil, pues, que en el transcurso de la carrera encuentre otro profesor de esa índole.

miércoles, 27 de junio de 2012

Breve mirada a la vida de Ramón López Velarde


Primer hijo de los nueve del abogado José Guadalupe López Velarde, Ramón nació en la ciudad de Zacatecas, en México, el 15 de junio de 1888.
En su juventud conoció a Josefa de los Ríos quien desde ya dejará una huella indeleble en Ramón. Tanto fue el recuerdo que tuvo de ella que en el año 1905 su primer poema llevará el rótulo de Fuensanta y en 1915 sus grandiosos e incipientes poemas tendrán inspiración alguna en la ya mencionada. Su segundo poemario publicado en 1919 llevará el título de Zozobra, en donde la ironía se eleva al punto máximo.
Los síntomas y malestares de una enfermedad, acaso la sífilis o la bronconeumonía, se presentarán ya a sus 33 años de edad. Es entonces que en este año el autor fallece. Como todo reconocimiento, éste llegará después de su muerte. Gracias a las instancias de José Vasconcelos Calderón, se le atribuirá a Ramón como "El poeta nacional".


Vehemencia del Internet




Desde 1958, año del nacimiento del Internet, la tecnología impetuosamente ha ido escalando en la historia de la humanidad. Sin embargo, fue un invento que ha inundado, sin duda alguna, la cotidianeidad de nuestras vidas y que se ha sido obra de Steve Jobs: El IPhone. Éste dispositivo móvil, lanzado al mundo en junio del 2007, combina el Internet, el computador, la comunicación y otras necesidades tecnológicas en un diminuto aparato.

Relato sobre "Marilyn Monroe" de Andy Warhol


Hará casi ya 60 años, Warhol se encontraba mirando la televisión en su vivienda cuando, inesperadamente, vio que en aquélla salía en un programa, como protagonista, la bellísima Marilyn Monroe. Tan hermosa le pareció que pensó que no podía dejar pasar la oportunidad de convertirla en una obra de arte.
Y Así fue. En menos de un año comenzó con aquella empresa. Primero pensó que ello era un mero capricho y que sólo lograría quedar en el baúl de sus recuerdos.
Un tiempo después, sin haber sido consciente de lo que se podía avecinar, los nueve distintos rostros en color diferente de Marilyn Monroe, fue catalogado como una creación maestra. 

Descripción de "Ascenso al Calvario" de Jerónimo Bosch


En la obra Ascenso al Calvario de El Bosco, una multitud abigarrada se encuentra rodeando a Jesús, el cual, está cargando la cruz. Algunos expresando ademanes vesánicos, acaso otros representando lo maligno del ser humano. En esos rostros de codicia, sin embargo, se ve con claridad excepcional a una mujer de tez blanca que está por la parte inferior de la izquierda. Una puritana que sobresale de ese variopinto de personas.


Interpretación de "Las señoritas de Avignon" de Picasso


Se puede observar con acuidad que las cinco mujeres pintadas desnudas tratan de mostrarse atractivas simulando poses llamativas. Sin embargo, las dos últimas presentan expresiones disímiles, no tan afeminadas. Acaso el propósito de Picasso es la de poner de manifiesto la incongruencia que da la combinación entre la femineidad y masculinidad.


jueves, 14 de junio de 2012

El extraño caso del pisa papel

El relato breve comienza, ya mis años no me dejan recordar bien, en 1986. Una noche oscurísima reinaba en aquél entonces, el silencio impuso su férula; una atmósfera sosegada y pacífica era el mejor regalo de Dios para que un escritor miraflorino terminara su obra.
Hizo una pausa, pues la melodía que venía de la finca adyacente era inmensamente sutil, era, sin duda alguna, La Sinfonía Bolero de Maurice Ravel. Esos pequeños minutos se habían convertido en la gloria de toda su vida, una gran felicidad se apoderó de él; sin embargo, pasarían tres minutos para que la cálida música dejara de sonar, y para que un gato comience a maullar de tal forma que la desesperación invadiera al joven escritor.
Gritaba y trataba de silenciar al gato con toda injuria posible pero era en vano, el animal seguía emitiendo un ruido infernal. Observó el pisa papel que su abuelito le había regalado otrora: <<Nieto, éste pisa papel tiene trescientos años de antigüedad, por favor, consérvalo>>, el escritor recordaba. No obstante le pareció la única alternativa posible para acabar con esa molestia. Y así fue, con vehemencia y, tal vez con exactitud, lanzó el regalo de su abuelo, finalizando así el maullido del gato. Pasaría una hora más para que el escribidor se durmiera.
El reloj apuntó las 9 de la mañana, y fue entonces que decidió ir a la azotea de su vecina y así poder buscar el pisa papel. Aquella accedió y comenzó, entonces, la incesante búsqueda. El hado ya estaba escrito, el joven escritor no pudo encontrar lo que buscaba por más que intentaba; resignado se retiró a su casa.
Los años habían pasado; la fama y el reconocimiento de las buenas obras que había publicado el escritor miraflorino eran ya una realidad. Vivir en París fue siempre un sueño para él, no obstante, se sentía orgulloso de acordarse de ese deseo juvenil que estaba cumplido. Paseaba por las calles parisinas y se vio observando una casa de antigüedades que nunca había entrado. Atraído por un objeto que le resultaba familiar, entró intempestivamente.
La melodía que salía del toca discos era excelente, obligaba a moverse y parecía hecha para realizar un jolgorio, era el magnífico Mambo dirigido por Gustavo Duramel. Luego de haber atendido la música, el escritor se acercó al vendedor. Le pareció inextricable el asunto, no podía creer como había llegado ese objeto a París, y que, incluso, lo tuviera un vendedor viejo y enjuto, que casi no podía ver. Asombrado, le dijo:
- ¿Qué hace mi pisa papel ahí?
- ¿Ya no te acuerdas? –Burlonamente respondió el vendedor–, tú lo arrojaste una noche.